jueves, 3 de noviembre de 2011

YAKITORI

Originario de Japón durante el periodo EDO, aparece por primera vez en el siglo XVII de nuestra era. Es un término culinario que se usa para la utilización de aves de caza. Fueron los precursores en la elaboración de este tipo de alimento en el santuario de Pan peclir de Kioto, donde iban a ofrecer las cosechas. Durante el viaje los agricultores cocinaban y se comían pequeñas aves que cazaban y que eran consideradas dañinas para sus cosechas.
Se utilizaban unos trozos de bambú donde se ensartaban los alimentos y esto les facilitaba cocinar encima de las brasas cuando se detenían para descansar a lo largo del camino en el periodo Meiju S. XIX
El yakitori fue aceptado como un plato popular. Se utilizaban diferentes partes de las aves que no se podía usar para cocinarlas de otra forma.
Era un producto económico que se podía cocinar al aire libre.
En estos momentos las aves de caza solo se pueden comer en restaurantes del sudeste asiático y suele comerlo la alta aristocracia japonesa.

viernes, 4 de marzo de 2011

EL RINCÓN DEL POETA

Transcribo un poema que por su ternura me ha llegado al alma.
POETA: VICENTE MOLINA FOIX
Nacido en Elche en 1.946 seleccionado como uno de los Nueve Novísimos españoles.
Me gustaría algún comentario sobre la poesía ¡Ánimo!

EL HIJO QUE NO TUVE

Tu rostro sin hacer
en el rostro de un niño a gatas
sobre la arena húmeda del primer dia
de playa
de este verano de sol frio.
Un niño que es un rey entre los juguetes:
el cubo y la pala, el balón amarillo,
la rueda negra del salvavidas
en el que tu,
que nunca viste el mar,
te alejas de mí
hasta el fin del océano.

El niño en el paseo marítimo
tira de un hilo
un cochecito de plástico
con dos muñecos dentro,
uno al lado del otro.
somos tu madre y yo
sentados en la primera fila del cochecito,
sin tocarnos la mano,
sin mirarnos las caras,
temerosos de descubrir
al niño pequeño
que les arrastra
sin volver sus ojitos nunca abiertos
hacia nosotros.

Llegan después las noches de verano.
las noches de los dias sin ti.
he pasado la vida durmiendo sin tí.
Sin tu llanto al despertar
con miedo en la cuna
al no ver a nadie a tu lado.
y ahora, cuando no existes,
vienes tu a despertarme
con el recuerdo de lo que pudo ser,
mientras tu madre
vestida con la ropa de entonces,
sale desde su olvido
y me pregunta,
cuando ya no hay tiempo:
¿Que nombre le ponemos a nuestro hijo?